
16 sep Consejos para una buena gestión de los periodos de pago
La gestión de los periodos de pago es fundamental para que PYMES y autónomos puedan mantener su actividad. Para conseguir mantener un buen control sobre los cobros es preciso establecer unas condiciones específicas, claras, seguras y realistas pero que a su vez sean flexibles y puedan adaptarse a ocasiones concretas y situaciones puntuales. La finalidad de autónomos y empresas es poder gestionar los cobros de manera adecuada para optimizar beneficios, llevando un control de forma activa y no esperando a que los pagos se realicen de forma automática.
Para hacer una buena gestión de los periodos de pago, hay que tener presente 3 factores importantes:
1. Fase de negociación
Es vital negociar con los clientes las condiciones de cobro que se van a estipular. Ha de establecerse un único sistema de cobro y la fecha de vencimiento de las facturas en función de los intereses del autónomo o de la empresa.
2. Gestión
El responsable de la gestión de los cobros en el caso de las PYMES suele ser el director financiero o administrativo. Esta persona o departamento se encargará de obtener todos los datos acerca de cómo, cuándo y de qué manera se van a efectuar los cobros.
Sus funciones básicas serán:
· Facturación
· Contabilidad de los cobros
· Preparación y gestión de recibos y cobros que la empresa tenga que reclamar
· Emisión de facturas especiales
· Archivo y control de la documentación referente a cada cliente
Una adecuada gestión de los periodos de cobro hará posible el pago puntual. El proceso de cobro se puede mejorar de dos formas posibles:
1 – Cambiando los hábitos de pago de los clientes. Una alternativa sería ofrecer incentivos para el pago anticipado de facturas o el descuento de pagarés.
2 – Obviar o desviar la cuestión mediante el empleo de sistemas como el factoring.
La gestión de los periodos de cobro se puede resumir en cuatro puntos clave:
1. Establecer anticipadamente las condiciones del crédito
2. La concesión de crédito a los clientes
3. Realizar un control de los comportamientos de pago y un seguimiento pormenorizado de los cobros
4. Cerciorarse de mantener una correcta inversión en cuentas de clientes
3. Control y supervisión de los cobros
El seguimiento y control de los cobros es fundamental para la tesorería del negocio. Es preciso cerciorarse con frecuencia de que los pagos se realizan según las condiciones acordadas y en los periodos establecidos. La falta de control en este sentido puede significar echar el cierre a la empresa.
Ficomsa: Descuento de pagarés
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